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Sin nombre pero con sello




Autor: Andrea Hasselbrinck


“Vamos a colocarnos aquí con las mariposas amarillas de Mauricio Babilonia, se debe ver chévere, pero arréglate el cabello Lidia que tienes unos mechones ahí como para el otro lado” le decía él entre risas a ella, mientras esperaban la foto.


Hace algunos días un dúo de muchachos subió un video en sus redes sociales, solo por diversión, sin saberlo, hoy cuenta con más de 1,100 reproducciones en Instagram, la pregunta de muchos: ¿Quiénes son?



Una de las combinaciones menos esperadas, una comunicadora social y un ingeniero mecánico que se unen para hacer música. Ella, con su pelo rizado, alborotado e indomable como su personalidad, él, con un peinado clásico de caballero juntan sus talentos para crear obras de arte como estas, que es la primera, más no la última.


"Nosotros nos conocimos en un retiro que estaban haciendo en la iglesia, yo fui a vivirlo y el estaba sirviendo, así comenzamos a hablar más, porque ya nos conocíamos pese a que no eramos tan cercanos, él es el mejor amigo de mi novio, y ahora yo soy super amiga de su novia" contaba Lidia, rememorando el primer paso de esta unión.


La llama inextinguible de Lidia Wilches


Comenzó en el mundo de la música desde niña, como una gran parte de los padres, en vacaciones los enviaban a talleres y cursos de todo tipo, entre esos uno de piano y guitarra. En compañía de su hermano en cada academia por la que pasaron dejaban huella, hasta que un día, sin ella saberlo, descubrieron algo que llevaba escondido dentro de su ser, el canto.


En el transcurso de una de sus clases de guitarra se le dio por cantar lo que estaban interpretando, su melodiosa voz impacta a todos los que la escuchan desde tiempos inmemorables, allí fue cuando supieron que hacer, pues ese talento no se podía dejar ahí así como así, por ende, cambiaron el curso de guitarra por uno de técnica vocal.


A sus 11 años era algo que le apasionaba, era una llama que no se apagaba, aunque eso no era lo que ella creía, intentó de muchas formas huir de eso, lo veía más como una desgracia que como una bendición, así que a medida que fue creciendo se fue alejando de todo eso que ya le fastidiaba, ni siquiera quería escuchar música en la emisora, las inseguridades y miedos que vienen con la adolescencia la atraparon por mucho tiempo, cubriendo esa mágica herramienta que la podía liberar, además que no sabía que ese era su objeto mágico de liberación.


Su novio estaba enterado de la bella voz de Lidia, entonces se juntó con su mejor amigo 'Pipe' para que la incentivara a grabar algo juntos,un cover. Armaron el plan, él la iba a invitar a su casa y "casualmente" 'Pipe' iba a estar ahí con su guitarra para que lo ayudaran a filmar un video, por cosas de la vida iba enfermarse de la garganta en ese preciso momento, todo estaba fríamente calculado, el pequeño detalle fue que Lidia le escribió primero al mejor amigo de su novio y en medio de la conversación "cuadraron" para trabajr juntos.


Se reunieron, desafortunadamente nunca montaron el cover en ninguna plataforma. Pasó exactamente una semana cuando ella recibe una llamada de su profesora Sonia Cañón pidiéndole que vaya a amenizar la clausura del proyecto Prensa Escuela que hace parte de la universidad en la que estudia

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