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Varios alumnos de distintas instituciones en Barranquilla prefirieron regresar a las clases portando el tapabocas en su rostro por motivos de seguridad.
Con más dudas que certezas, varios estudiantes regresaron a las instituciones de Barranquilla sin la obligación de portar los tapabocas en sus rostros, pero pese a esta medida, muchos alumnos en la capital del Atlántico optaron por seguir manteniendo los protocolos de bioseguridad y continuaron utilizando este elemento en el primer día sin el uso de mascarillas.
Los estudiantes ingresaron a las aulas de clases de forma habitual, algunos con la emoción de poder respirar sin filtros, mientras que otros acudieron a los salones con el temor de quitarse el tapabocas, por lo que prefirieron mantener esta medida ante la incertidumbre que genera contagiarse por COVID-19.
“Me parece que deberíamos utilizar el tapabocas porque todavía el virus está y sería bueno utilizarlo para protegernos. Yo siempre he estado pendiente de no quitármelo y mantener el metro de distancia. Le digo a mis compañeros que mantengan puesto el tapabocas y tengan sus vacunas al día”, agregó la estudiante Lina Pérez.
Desde el inicio de la pandemia generada por el COVID-19, el tapabocas se convirtió en el principal elemento para combatir esta enfermedad, pero después de avanzar en los esquemas de vacunación, el Gobierno Nacional determinó que a partir de este lunes 16 de mayo los estudiantes no tendrían la obligación de portarlo dentro de las instituciones.
“Me siento extraña porque con el tiempo me acostumbré al tapabocas y quitármelo no va a ser sencillo y no hay que bajar la guardia porque uno nunca sabe que puede pasar, por eso siempre hay que estar a la vanguardia”, expresó la estudiante Rosa Rudas.
Mientras tanto, las autoridades de Barranquilla recomendaron a los padres de familia a continuar con los procesos de vacunación en los distintos puntos masivos que se encuentran habilitados en la ciudad.
Recordemos que la cobertura de vacunación en menores de 3 a 11 años en Barranquilla supera el 97% en cuanto a primeras dosis, mientras que el 62% cuenta con segundas dosis.